Advertencia para cualquier lector-reflector humano

La poesía no puede ser tu piedra angular
la poesía no podrá ser siquiera un poco de arena
la poesía quema o destruye la sangre cauta
la corrompida sangre la vuelve tinta
pintando con nuestra vida las hojas en blanco.
Por eso el miedo acecha mi cuerpo,
por eso mi teclado es la espada de Damocles
Así concibo los labios definitivos y rosas
de mis manos, de las caricias como espadas.
Así, brevemente, Reflector Humano
oía como me dictabas un deseo.

Bienvenida/o

denguecortos@hotmail.com

domingo, 25 de junio de 2023

El voto de ultraderecha
















He conocido un voto
de promesa.
He conocido un voto
de pobreza.
He conocido un voto
de odio.
He conocido un voto
de venganza.
He conocido un voto
paniaguado.
He conocido un voto
rogado.
He conocido un voto
robado.
He conocido un voto
místico.
He conocido un voto
de amén.
He conocido un voto
de censura.
He conocido un voto
particular.
He conocido un voto
secreto.
He conocido un voto
útil.
Y también he conocido 
un voto contra ti
contra todas...
y contra sí mismo.

Ahuyentamos los besos

Ahuyentamos los besos como el vapor

cuando se condensa en el cristal

con las manos que nos percibieron

antes que fuésemos dos gotas de agua.



Y no hay noche que no eche de menos

nuestros suaves presentimientos

que nos hacían aventurarnos

hacia un doloroso final.



Confieso que detrás del móvil hubo silencios,

y palabras heridas y cobardes

que no hubo venganza pero sí dolor

que hubo tiempo pero también vacío.



Pero entonces no sabíamos escucharnos

ni sabíamos que el amor era miles de gotas

que se esparcían en la mampara

retenidas por un deseo inmarcesible.



Dejamos enfriarlo

dejó de envolvernos el vapor

que un día calentó un traje

hecho a medida para nuestra boca.

El regreso

Hoy he recuperado mis entradas como a mis entrañas, que andaban navegando solas. Las he seguido estos años a distancia, con impotencia, con impaciencia, en silencio, para ver cómo encallaban pero han resistido el paso del tiempo y de las contraseñas.

Han vuelto a mi casa para herirme como una palabra roma, que no atraviesa pero que te contusiona, que llama a mi puerta enmascarando su identidad. Y pese a saber que entra un misterio en mi vida, quizá Maldoror, le he recibido con una sonrisa y le he puesto un papel y un rotulador. Pero ha preferido utilizar todas mis paredes para increparme su abandono y dejarlas por quince mil años más como si se creyera eterno, como si su pensamiento trascendiera todo mi ser.

Sé o imagino, a veces mis creencias me juegan malas pasadas, que mi hijo de la piel muerta le envía en mi busca. Llega una etapa de resistencia, de volver a las catacumbas en las que fui creado y a las que poco a poco les daré color e identidad.

Hoy toca comer esta sopa rancia de letras que se presta a ser querida, esperando que el limón que le echo disimule su putrefacción. He aquí una ilusión que vuelve por pesadillas tratando de coser mi cuerpo tras una autopsia.

Hola a todas, todos y todes.